El sueño de un sol y de un mar y una vida peligrosa
cambiando lo amargo por miel, y la gris ciudad por rosas
te hace bien, tanto como hace mal; te hace odiar, tanto como querer y más.
Cambiaste de tiempo y de amor, y de música y de ideas
Cambiaste de sexo y de Dios, de color y de fronteras
pero en sí, nada más cambiarás y un sensual abandono vendrá y el fin.